Nuestro centro se adhiere al Pacto Educativo Global, comprometiéndonos personal y conjuntamente, a la llamada que, el Santo Padre ha lanzado: «Es hora de mirar hacia adelante con valentía y esperanza. Que nos sostenga la convicción de que en la educación se encuentra la semilla de la esperanza: una esperanza de paz y de justicia. Una esperanza de belleza, de bondad; una esperanza de armonía social». Comprometidos por y con las generaciones más jóvenes con la iniciativa «Juntos somos Luz» de Escuelas Católicas, en una propuesta de acción conjunta con la que pretendemos alcanzar los 7 objetivos propuestos por el Papa:

  • Primero: poner en el centro de todo proceso educativo formal e informal a la persona, su valor, su dignidad, para hacer sobresalir su propia especificidad, su belleza, su singularidad y, al mismo tiempo, su capacidad de relacionarse con los demás y con la realidad que la rodea, rechazando esos estilos de vida que favorecen la difusión de la cultura del descarte.
  • Segundo: escuchar la voz de los niñ@s, adolescentes y jóvenes a quienes transmitimos valores y conocimientos, para construir juntos un futuro de justicia y de paz, una vida digna para cada persona.
  • Tercero: fomentar la plena participación de las niñas y de las jóvenes en la educación.
  • Cuarto: tener a la familia como primera e indispensable educadora.
  • Quinto: educar y educarnos para acoger, abriéndonos a los más vulnerables y marginados.
  • Sexto: comprometernos a estudiar para encontrar otras formas de entender la economía, la política, el crecimiento y el progreso, para que estén verdaderamente al servicio del hombre y de toda la familia humana en la perspectiva de una ecología integral.
  • Séptimo: salvaguardar y cultivar nuestra casa común, protegiéndola de la explotación de sus recursos, adoptando estilos de vida más sobrios y buscando el aprovechamiento integral de las energías renovables y respetuosas del entorno humano y natural, siguiendo los principios de subsidiariedad y solidaridad y de la economía circular.